La posibilidad de que el campeón panameño, Anselmo “Chemito” Moreno, se encuentre en un cuadrilátero con el filipino Nonito Donaire pareciera estar muy cerca. Tal vez las circunstancias de hoy no permitan un encuentro de manera inmediata, pero todo hace entrever que algún día se verán las caras.
Moreno es posible que no tenga el cartel de otros adversarios, como aconteció, por ejemplo, con el mexicano Fernando Montiel, la más reciente víctima de Nonito, pero tiene calidad y un crédito como campeón mundial de las 118 libras que es muy importante, sobre todo para un púgil como el filipino que busca un lugar entre los grandes, como acontece con su compatriota Manny Pacquiao.
Pero las distancias por ahora son muy grandes, principalmente económicamente, por las personas que están cerca de Donaire y de quiénes cuidan los intereses del panameño. Bob Arum es uno de los más grandes magnates del pugilismo mundial, algo que no pueden decir los que manejan los intereses de Moreno.
Es por ello que, si el encuentro no llega a darse en los próximos meses, sería recomendable que el campeón panameño realizara un par de buenas defensas y cuando digo buenas, no solo hablo de ganar de manera inobjetable sino de hacerlo muy cerca del mercado americano, que es la que al final podría decidir su posible pleito con el filipino y la posible bolsa que ganaría por ello.
Y es que la pelea aún está en veremos porque Moreno y sus manejadores sienten que la bolsa de 300 mil dólares que le han ofrecido no es digna de un súper campeón como es reconocido por la Asociación Mundial de Boxeo.
Posiblemente esto sea verdad, pero las oportunidades se toman en la primera de cambio y una bolsa de 300 mil dólares es muy buena, máxime si esto va casado con una presentación ante el exigente mercado americano.
Además, es importante recordar que en estos tiempos los títulos no son tan atractivos como antes, sobre todo si en la otra esquina está un púgil con un gran carisma y un excelente respaldo promocional y comercial.
En mi opinión, a Chemito le ha llegado la gran oportunidad y no debe desaprovecharla porque Nonito está dispuesto a encerrarse con él en un cuadrilátero, buscando grandes e importantes victorias y una frente al súper campeón de la AMB, que tal vez para su ego personal le sería muy útil.
Es decir, que los dos están frente a una gran oportunidad. Para el panameño Moreno entrar de una vez por toda al mundo del estrellato como es el sueño de todo boxeador, mientras que para Donaire es ser el número uno del mundo luego de pasar por encima de todos los que se oponen a ese cometido.